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UNIDAD 3 - CUARTO MATERIAL - INTRODUCCION A LA VIDA UNIVERSITARIA - UCU
Tipo: Apuntes
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¡No te pierdas las partes importantes!
1. Introducción ……………………………………………………………………………………………………….... 03 1.1. Presentación 1.2. Guía de navegación: ¿Cómo aprovechar al máximo este cuadernillo? 2. Organización del tiempo ………………………………………………………………………….…….... 05 2.1. Planificación y horarios 2.2. Herramientas para la gestión del tiempo 2.3. Cómo evitar la procrastinación 3. Técnicas de estudio ………………………………………………………………………………….…….... 12 3.1. Lectura comprensiva 3.2. Subrayado y esquemas 3.3. Método Cornell 3.4. Método Pomodoro 3.5. Técnica Feynman 3.6. Espaciado 3.7. Testeo activo 3.8. Técnica de los mapas mentales 3.9. Elaboración de resúmenes críticos 3.10. Técnicas mnemotécnicas 4. Hábitos saludables para el estudio ………………………………………………………………. 15 4.1. Creación de un espacio de estudio adecuado 4.2. Importancia del descanso y sueño 4.3. Alimentación y ejercicio para el rendimiento académico 5. Trabajo en equipo y redes de apoyo ………………………………………………………….…. 17 5.1. Ventajas del trabajo en grupo 5.2. Uso de plataformas virtuales 5.3. Dónde buscar ayuda 6. Preparación para exámenes ………………………………………………………………….…….…. 21 6.1. Planificación a largo plazo 6.2. Simulación de exámenes 6.3. Técnicas para reducir el estrés 7. Recursos adicionales ……………………….…….………………………………………………………... 23 7.1. Planificación a largo plazo 7.1. Bibliografía recomendada 7.2. Herramientas digitales útiles 8. Cierre …………………………………………………………………………………………………………………..... 26
¿Cómo aprovechar al máximo este cuadernillo?
La vida universitaria puede ser demandante, y tener a mano una guía clara y sencilla puede ser útil. Este cuadernillo fue diseñado para que lo consultes de forma práctica, según tus necesidades en cada momento. No es necesario que lo leas como a un cuento o una novela (de principio a fin de una sola vez). Podes empezar por los temas que más te interesen, o que consideres más urgentes.
Aquí te damos algunas claves para sacarle el mayor provecho:
¿Necesitás organizar tu tiempo?
Dirigite a la sección de Organización del tiempo donde vas a encontrar herramientas y sugerencias prácticas para gestionar mejor tus días dentro del cuatrimestre.
¿Buscás mejorar tu manera de estudiar?
Las Técnicas de estudio te presentan métodos probados para optimizar el abordaje y la comprensión de la información.
¿Te preocupa cómo enfrentar los exámenes?
En la sección de Preparación para exámenes, te brindamos estrategias para que llegues más seguro y preparado a las evaluaciones.
Usá este cuadernillo como un recurso a lo largo de todo tu primer año. No dudes en volver a él cada vez que lo necesites.
En la Universidad es importante organizar los tiempos. Generalmente en la escuela secundaria los horarios y las actividades suelen estar más estructurados, pero en la Universidad es tu tarea organizar el tiempo de manera eficiente para cumplir con las múltiples demandas: clases, lecturas, trabajos prácticos, exámenes, y además, tu vida personal y social.
El primer paso para aprovechar tu tiempo es planificar. La planificación te permitirá visualizar tus actividades y cumplir con las fechas importantes. Es clave que organices tu calendario desde el comienzo del cuatrimestre, para eso te recomendamos tener siempre como referencia el calendario académico de tu carrera.
Organizar tu tiempo de manera eficiente requiere más que solo buena voluntad. Aquí te damos algunos tips prácticos y ejemplos para que puedas aplicar estas recomendaciones a tu vida universitaria.
Usá una agenda o calendario digital:
Si preferís un calendario digital, herramientas como Google Calendar son muy útiles. Podés ingresar a tu cuenta de Google y crear un evento para cada clase o tarea importante. Para hacerlo, simplemente clickeá en el día y hora correspondientes, añadí el título de la actividad (ej. “Clase de Contabilidad”, “Entrega de Trabajo Práctico”), y activa las notificaciones para que te recuerde con anticipación.
Intentá programar el tiempo que necesitarás para estudiar cada día, no solo las fechas de entrega. Esto te permitirá tener una noción realista del tiempo que dispones. Por ejemplo: no es lo mismo pensar que tenemos X Cantidad de horas disponibles a saber que de 24hs que tiene un día 5hs estás cursando, 7hs durmiendo, 1hs realizando actividad física, etc.
Dividí grandes tareas en actividades más pequeñas:
Si tenés un trabajo práctico de 10 páginas que entregar en tres semanas, no esperes hasta el último minuto. Dividilo en partes manejables. Por ejemplo:
■ Semana 1: Buscar material bibliográfico y hacer un esquema preliminar. ■ Semana 2: Redactar el cuerpo principal del trabajo. ■ Semana 3: Revisar y corregir errores, y preparar la versión final.
¿Cómo aplicarla? Imaginemos que tenés una semana con varias tareas pendientes:
Usá un cuaderno o una hoja y dibuja cuatro cuadrantes. Colocá tus tareas en cada cuadrante según su categoría, y aborda primero las que están en "importante y urgente". Así te aseguras de estar dedicando el tiempo correcto a las tareas que realmente importan.
Calendarios académicos
Uno de los mayores aliados para cualquier estudiante es el calendario académico de la universidad. En él se especifican fechas clave, como las inscripciones, los exámenes parciales, finales y recesos. Tener este calendario a mano es esencial para planificar tu cuatrimestre.
¿Cómo aplicarlo?
Aplicaciones de gestión del tiempo
La tecnología puede ser una gran aliada cuando se trata de organizarse. Existen múltiples aplicaciones que te ayudan a llevar un registro de tus tareas y pendientes de manera eficiente y accesible.
Trello: Trello es una herramienta de gestión de proyectos que podés adaptar para organizar tu estudio. Te permite crear tableros y listas para diferentes materias, trabajos y exámenes.
¿Cómo aplicarlo?
Todoist: Esta aplicación permite crear listas de tareas con fechas de vencimiento y prioridades. Es ideal para estudiantes que tienen varias actividades por día y necesitan un recordatorio constante.
¿Cómo aplicarlo?
Técnica Pomodoro
La técnica Pomodoro es una estrategia que te ayuda a mantenerte concentrado en una tarea por períodos cortos de tiempo (generalmente 25 minutos), seguidos de pausas breves. Es especialmente útil cuando tenés que abordar tareas largas o difíciles.
¿Cómo aplicarla?
Esta técnica es efectiva porque permite enfocarte de manera intensa durante períodos cortos, evitando el cansancio mental.
Existen canales de twitch y youtube exclusivos de este método, donde el video en vivo contabiliza los minutos activos y las pausas.
Revisión semanal del plan
Una buena organización requiere seguimiento. Para evitar que te desvíes de tus objetivos o te quedes rezagado, es importante que revises y ajustes tu plan semanalmente.
Si recibís un correo de la universidad con una solicitud simple (como confirmar una inscripción o responder a una consulta), en lugar de posponerlo, realizá la acción al instante. Lo mismo podés aplicar a tareas cortas como ordenar el escritorio o revisar una bibliografía.
3. Establecer metas claras y plazos realistas
A veces procrastinamos porque no tenemos una idea clara de lo que queremos lograr o cuándo debemos hacerlo. Establecer metas concretas, específicas y con un plazo definido puede ayudar a combatir la procrastinación, ya que genera un sentido de urgencia y dirección.
¿Cómo aplicarlo?
En lugar de pensar en "estudiar para el parcial", proponete "leer el capítulo 1 el lunes" o "resumir las lecturas el miércoles". Al descomponer tus metas en acciones concretas, también podés establecer plazos realistas para cada una, lo que te mantendrá enfocado y evitará el típico “lo hago mañana”.
4. Eliminar distracciones
Las distracciones son uno de los mayores facilitadores de la procrastinación. Redes sociales, notificaciones del celular, o incluso el desorden en tu lugar de estudio pueden desviar tu atención. Crear un ambiente adecuado para el estudio es esencial para mantener el enfoque.
¿Cómo aplicarlo?
Desactivá las notificaciones del teléfono o dejalo en otra habitación mientras estudiás. Si usás la computadora para estudiar, podés instalar bloqueadores de sitios web para evitar la tentación de revisar redes sociales. Además, asegurate de tener un espacio de trabajo ordenado, con todos los materiales que necesitás a mano, para que nada te interrumpa.
A veces, necesitamos un pequeño empujón para comenzar. Las recompensas, aunque sean simples, pueden ser una forma efectiva de motivarte a realizar una tarea que preferirías posponer.
¿Cómo aplicarlo?
Establecé pequeñas recompensas para cuando completes una tarea. Por ejemplo, si terminás de leer un capítulo, podés darte un descanso de 10 minutos para hacer algo que disfrutes (ver un video, salir a caminar). Este
sistema de recompensas te ayudará a asociar el cumplimiento de tus tareas con sensaciones positivas.
6. Pensar en el impacto.
Procrastinar puede parecer inofensivo en el momento, pero postergar tareas es más que solo aplazar acciones; es diferir el bienestar futuro. Cada vez que evitamos una actividad pendiente, estamos creando una cadena de consecuencias que afecta nuestro tiempo, nuestros proyectos y, en última instancia, nuestras oportunidades.
¿Como aplicarlo?
Imagina el impacto de cada tarea no completada: el estrés acumulado, la falta de progreso y el riesgo de comprometer nuestras metas. En lugar de enfrentar esa presión en el último momento, podes ahorrarte ese estrés a futuro. Recordemos que el hábito de procrastinar puede traerte problemas a futuro. Evitar la procrastinación significa tomar control, invertir en el futuro, y abrirnos a nuevas oportunidades.
Comprométete con tus metas y sé consciente del impacto positivo que cada pequeño paso a tiempo puede tener en tu vida.
7. Aceptar la imperfección
A menudo, la procrastinación está relacionada con el perfeccionismo. Postergamos una tarea porque queremos que el resultado sea perfecto y nos preocupa no estar a la altura de nuestras expectativas. Sin embargo, es importante aceptar que no siempre todo será perfecto desde el primer intento, y eso está bien.
¿Cómo aplicarlo?
Permitite empezar, aunque no sientas que el trabajo será perfecto. Recordá que podés volver y mejorar lo que hiciste más adelante, pero lo más importante es que des el primer paso. Completar una tarea imperfecta es mejor que no hacer nada.
Este método te permite estructurar tus apuntes de una manera que facilita la comprensión y el repaso. Consiste en dividir la página en tres secciones:
● Notas: En el lado derecho, tomás apuntes durante la clase o lectura. ● Preguntas/Palabras clave: A la izquierda, después de la clase, escribís preguntas o palabras clave relacionadas con las notas. ● Resumen: Al final, realizás un breve resumen del contenido principal.
Esta técnica de gestión del tiempo te ayuda a mantenerte enfocado en una tarea por períodos cortos de tiempo, con descansos intermedios. Es ideal para evitar la fatiga mental:
Una de las mejores maneras de retener lo que aprendiste es enseñarlo a otra persona. Esta técnica te invita a comprender el tema en profundidad para poder explicarlo de manera sencilla:
El estudio espaciado implica distribuir el estudio de un tema en intervalos de tiempo, en lugar de concentrarlo todo en una sesión. Esta técnica mejora la retención a largo plazo:
● Programá sesiones de estudio sobre el mismo tema en diferentes días. ● Revisá el contenido varias veces, espaciando cada repaso para que la información se consolide en tu memoria.
En lugar de leer o revisar pasivamente los apuntes, poné a prueba tu conocimiento:
● Autocuestionarios: Hacé preguntas sobre el tema y tratá de responderlas sin mirar los apuntes o el material de estudio. ● Simulaciones de exámenes: Creá tus propios exámenes con preguntas de diferentes niveles de dificultad para evaluar tu comprensión.
Los mapas mentales son representaciones gráficas que organizan la información de manera visual, mostrando la relación entre los conceptos de forma creativa y estructurada:
● Empezá con un tema central. ● Agregá ramas que representen ideas secundarias o relacionadas. ● Usá colores, símbolos y palabras clave para ayudar a recordar mejor la información.
Un buen resumen no es simplemente copiar y pegar la información del texto original. Es una síntesis de lo más importante con tus propias palabras:
● Leé todo el material y subrayá las ideas clave. ● Escribí un resumen que incluya solo lo esencial, dejando fuera detalles menores. ● Añadí comentarios o reflexiones personales para ayudar a interiorizar la información.
Las mnemotecnias son herramientas que te ayudan a recordar información mediante asociaciones simples:
● Acrónimos: Creá palabras con las iniciales de conceptos clave. ● Asociaciones visuales: Relacioná una palabra con una imagen mental. ● Historias: Creá una pequeña historia que incluya los elementos que querés recordar.
día influye directamente en tu capacidad de aprendizaje y en la calidad del trabajo que realizás.
Recomendaciones para mejorar la calidad del descanso:
● Dormí entre 7 y 9 horas diarias: Durante el sueño, tu cerebro procesa y consolida la información aprendida durante el día. Dormir lo suficiente te ayudará a recordar mejor y a enfrentar las actividades con mayor energía. ● Crea una rutina de sueño: Intentá acostarte y levantarte siempre a la misma hora, incluso los fines de semana. Esto ayuda a regular tu reloj biológico y a tener un sueño más reparador. ● Tomá descansos regulares mientras estudiás: La gran mayoría de estudios al respecto coinciden en que el tiempo máximo de concentración en una misma tarea de una persona adulta es de aproximadamente 45 minutos. ● No uses pantallas antes de dormir: La luz azul de los dispositivos electrónicos puede afectar el sueño. Apagá la computadora, el teléfono o la tablet al menos 30 minutos antes de acostarte. ● Evita estudiar justo antes de dormir: Aunque parece tentador usar las horas nocturnas para avanzar con los estudios, esto puede afectar la calidad del sueño. Optá por actividades relajantes, como leer un libro ligero o practicar la meditación. ● Utilización de la “siesta”: al igual que los descansos, la siesta puede servir para mejorar el rendimiento, pero no conviene que sea demasiado larga.
Si tenés una carga de estudio intensa, podés incorporar pequeñas siestas (power naps) de 15-20 minutos durante el día. Esto puede revitalizarte sin interferir con el sueño nocturno.
Lo que comés y la cantidad de actividad física que realizás también tienen un impacto importante en tu rendimiento cognitivo. Una alimentación equilibrada y el ejercicio regular te ayudarán a mantener un cuerpo y mente saludables, mejorando tu concentración y capacidad de aprendizaje.
Consejos para mejorar tu alimentación y ejercicio:
● Comé alimentos ricos en nutrientes: Optá por una dieta equilibrada que incluya frutas, verduras, proteínas magras y granos enteros. Estos alimentos proporcionan energía duradera y mejoran la función cerebral. ● Desayuná todos los días: El desayuno es clave para empezar el día con energía. Elegí alimentos ricos en fibra y proteínas, como yogur con frutas, avena, o huevos con tostadas integrales. ● Hidratate: Tomá suficiente agua durante el día para mantenerte hidratado. La deshidratación puede afectar tu concentración y rendimiento. Intentá llevar siempre una botella de agua cuando estudies.
● Evitá alimentos procesados y con alto contenido de azúcar: Los alimentos azucarados o muy procesados pueden provocar picos y caídas en los niveles de energía, lo que afecta tu capacidad de concentración a largo plazo. Preferí opciones como nueces, frutas o barritas de cereales integrales para tus colaciones. ● Acompaña las sesiones de estudio con mate, café, alguna bebida que sirva para mantenerte concentrado.
Incorporá el ejercicio físico en tu rutina:
● Ejercicio regular: El ejercicio físico no solo es beneficioso para la salud en general, sino que también mejora la memoria y la capacidad de concentración. Podés realizar actividades aeróbicas, como caminar, correr o nadar, que estimulan la liberación de endorfinas, o practicar yoga para reducir el estrés y mejorar la flexibilidad. ● Ejercicio ligero durante los descansos: Si no tenés tiempo para ir al gimnasio, podés hacer ejercicios ligeros en los descansos de estudio. Estiramientos, caminar unos minutos o hacer sentadillas pueden ser suficientes para despejarte y mejorar tu circulación. ● Movete entre sesiones de estudio: Evitá estar sentado por períodos prolongados. Cada 60-90 minutos, levantate, estirá las piernas o caminá un poco. Esto mejora la oxigenación del cerebro y te ayuda a mantenerte enfocado.
La actividad física, combinada con una buena alimentación, no solo mejora el rendimiento académico, sino que también contribuye a una mejor salud mental, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad.
El trabajo en grupo es una de las experiencias más enriquecedoras en la universidad. Colaborar con tus compañeros no solo te ayuda a comprender mejor los temas, sino que también te prepara para las dinámicas laborales del futuro, donde la colaboración y la comunicación efectiva son fundamentales.
Ventajas del trabajo en grupo:
● Intercambio de ideas: Trabajar con otros te expone a diferentes perspectivas y enfoques. Esto puede ayudarte a ver los temas desde ángulos que no habías considerado antes. ● Distribución de tareas: En vez de cargar con todo el trabajo por tu cuenta, podés dividir las tareas entre los miembros del grupo, lo que facilita la organización y permite profundizar en distintos aspectos del contenido.
Tips para aprovechar estas plataformas:
Durante tu carrera, no siempre sabrás cómo abordar una situación o resolver un problema, y eso es normal. La universidad está llena de recursos y personas dispuestas a ayudarte.
Opciones de apoyo:
Profesores
Los profesores son tu primera línea de apoyo académico. Están allí no solo para impartir conocimientos, sino también para guiarte cuando enfrentes dudas o necesites profundizar en un tema. No dudes en consultarles, ya sea en clase o por las vías de comunicación que te habilita la Universidad.
Secretaría de carreras
En la modalidad presencial, la secretaría de tu facultad es un espacio administrativo clave que puede ayudarte a resolver cuestiones relacionadas con tu plan de estudios, la inscripción a materias, el acceso a becas, y otros trámites académicos.
Alumnos guía
Los alumnos guía son estudiantes avanzados que cumplen la función de orientar a los estudiantes nuevos o de primeros años. Ellos conocen de primera mano las dificultades que podés enfrentar y pueden ofrecerte consejos prácticos y orientación. ¡No dudes en contactarlos!
Compañeros
Tus compañeros de clase son una fuente de apoyo fundamental. No solo podés compartir experiencias académicas, sino que también pueden explicarte conceptos que no entendés, estudiar en grupo, y trabajar colaborativamente en proyectos.
Tutores de educación a distancia
Si estudias en la modalidad a distancia, los tutores juegan un papel clave. Actúan como intermediarios entre vos y la Universidad, y están a cargo de guiarte en tu recorrido. Recordá hacer todas tus consultas a través del Sistema de Consulta Alumnos.
Secretaría de asuntos institucionales
La secretaría de asuntos institucionales se ocupa de gestionar y promover los vínculos entre los estudiantes y la universidad, teniendo a cargo el área de Bienestar Estudiantil. ¡No dudes en acercarte a consultar o conversar cuando necesites!
Por otro lado, buscar el apoyo de psicólogos y terapias es una decisión que puede transformar positivamente el modo de sobrellevar la vida universitaria. La salud mental es tan esencial como la física, y a veces necesitamos de una guía para comprender y saber superar las dificultades emocionales que podemos transitar, así como también el estrés o simplemente para mejorar el bienestar general. La ayuda de psicólogos profesionales brindan un espacio seguro donde puedes expresarte libremente.
Tips para buscar ayuda eficazmente: