














Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity
Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium
Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity
Prepara tus exámenes con los documentos que comparten otros estudiantes como tú en Docsity
Los mejores documentos en venta realizados por estudiantes que han terminado sus estudios
Estudia con lecciones y exámenes resueltos basados en los programas académicos de las mejores universidades
Responde a preguntas de exámenes reales y pon a prueba tu preparación
Consigue puntos base para descargar
Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium
Comunidad
Pide ayuda a la comunidad y resuelve tus dudas de estudio
Descubre las mejores universidades de tu país según los usuarios de Docsity
Ebooks gratuitos
Descarga nuestras guías gratuitas sobre técnicas de estudio, métodos para controlar la ansiedad y consejos para la tesis preparadas por los tutores de Docsity
Las consideraciones importantes para los preparadores de estados financieros en la contabilidad interna de sociedades mercantiles, específicamente en la materia de contabilidad de costes. Se abordan temas como la clasificación de flujos de efectivo derivados de adquisiciones y disposiciones de subsidiarias y otros negocios, operaciones extranjeras, intereses, dividendos y arrendamientos. Además, se presentan objetivos y diferencias entre contabilidad financiera y contabilidad de costes.
Tipo: Apuntes
1 / 22
Esta página no es visible en la vista previa
¡No te pierdas las partes importantes!
La NIF B-2, “estado de flujos de efectivo”, plantea una serie de consideraciones para los preparadores de estados financieros. La Comisión de Normas de Información Financiera en este artículo incluye extractos de la NIF B-2 sobre ciertas clasificaciones de operaciones muy específicas a ser consideradas en la elaboración del estado de flujos para facilitar la preparación de este estado financiero. Operaciones que no afectan los flujos de efectivo Los preparadores de estados financieros deben excluir del estado de flujos de efectivo, todas las operaciones que no afectaron los flujos de efectivo. Es importante para ello recordar algunos ejemplos que plantea la norma de estas operaciones (párrafo 11 NIF B-2): Fluctuaciones cambiarias no realizadas. Efectos por reconocimiento del valor razonable. Conversión de deuda a capital y distribución de dividendos en acciones. Adquisición de un negocio con pago en acciones. Pagos en acciones a los empleados. Donaciones o aportaciones de capital en especie. Operaciones negociadas con intercambio de activos. Creación de reservas. Cualquier traspaso entre cuentas de capital contable. En la práctica se ha visto que algunas de las actividades mencionadas anteriormente y que no requieren flujos de efectivo, se destacan en el estado de flujos de efectivo, cuando es incorrecto que tengan un importe o rubro asociado. Adquisiciones y disposiciones de subsidiarias y otros negocios Los flujos de efectivo derivados de adquisiciones o disposiciones de subsidiarias y otros negocios deben clasificarse en actividades de inversión; asimismo, deben presentarse en un único renglón por separado que involucre toda la operación de adquisición o, en su caso, de disposición, en lugar de presentar la adquisición o disposición individual de los activos y pasivos de dichos negocios, a la fecha de adquisición o disposición. Los flujos de efectivo derivados de las adquisiciones no deben compensarse con los de las disposiciones (párrafo 25 NIF B-2).
como una operación de cobertura, los flujos de efectivo de dicho contrato deben clasificarse de la misma forma que los flujos de efectivo procedentes de la posición cubierta. Por ejemplo, si los flujos de efectivo de la partida cubierta son actividades de operación, los flujos de efectivo derivados del instrumento de cobertura, también lo son (párrafos 19h y 20 de NIF B-2). Impuesto a la utilidad Los impuestos a la utilidad deben clasificarse como actividades de operación a menos que con base en alguna NIF particular, deban presentarse específicamente asociados con actividades de inversión o de financiamiento, como en el caso del impuesto derivado de las operaciones discontinuadas, por lo cual el impuesto a la utilidad debe presentarse como parte de las actividades de inversión (párrafo 21 NIF B-2). Intereses capitalizados en activos fijos La NIF B-2 establece consideraciones adicionales, entre las cuales se menciona que los intereses pagados deben presentarse dentro de actividades de financiamiento, debido a que representan los costos de haber obtenido recursos de los acreedores financieros de la entidad; incluyendo los intereses capitalizados en activos (párrafo 38 NIF B-2). Flujos de efectivo de operaciones extranjeras En la conversión del estado de flujos de efectivo de la moneda funcional a la de informe, de una operación extranjera en un entorno económico NO inflacionario, se debe atender lo siguiente: Flujos de efectivo del periodo deben convertirse a tipo de cambio histórico, es decir, al referido a las fecha en la que se generó cada flujo en cuestión; El saldo inicial de efectivo debe convertirse al tipo de cambio a la fecha de cierre del periodo anterior; El saldo final de efectivo debe convertirse al tipo de cambio a la fecha de cierre del periodo actual. Intereses Los flujos de efectivo derivados de intereses cobrados deben presentarse en un rubro específico dentro del mismo grupo de actividades en el que se presentan los flujos de efectivo de la partida con la que están asociados.
Por ejemplo, las entradas de flujos de efectivo por intereses de instrumentos financieros de negociación deben presentarse, al igual que dichos instrumentos, en actividades de operación; si los intereses derivan de un instrumento clasificado como instrumento financiero para cobrar o vender (IFCV), el flujo de efectivo relativo debe presentarse en actividades de inversión (párrafo 37 NIF B-2). Los intereses pagados, siempre que se trate de entidades no financieras, deben presentarse dentro de actividades de financiamiento debido a que representan los costos de haber obtenido recursos por parte de los acreedores financieros de la entidad; dichos intereses pagados deben incluir los intereses capitalizados en activos (párrafo 38 NIF B-2). Dividendos Los flujos de efectivo derivados de dividendos cobrados deben presentarse en un rubro específico dentro del mismo grupo de actividades en el que se presentan los flujos de efectivo de la partida con la que están asociados. Por ejemplo: las entradas de flujos de efectivo por dividendos cobrados de instrumentos de negociación deben presentarse, al igual que dichos instrumentos, en actividades de operación; si los dividendos cobrados se derivan de una inversión permanente en una asociada, dichos flujos de efectivo deben presentarse en actividades de inversión (párrafo 39 NIF B-2). Las salidas de efectivo por dividendos pagados deben presentarse en actividades de financiamiento debido a que representan la retribución a los propietarios de una entidad por los recursos obtenidos de su parte (párrafo 40 NIF B-2). Operaciones de arrendamiento En el estado de flujos de efectivo, un arrendatario debe clasificar: a) Los pagos del pasivo por arredramiento y de los intereses relativos dentro de las actividades de financiamiento, conforme a la NIF B-2; y b) Los pagos de arrendamiento a corto plazo, de los activos de bajo valor y los variables, no incluidos en la valuación del pasivo por arrendamiento dentro de actividades de operación (ver párrafo 51.3 de la NIF D-5 Arrendamientos). En el estado de flujos de efectivo, un arrendador debe clasificar los cobros por arrendamientos dentro de las actividades de operación (ver párrafo 52.4 NIF D- Arrendamientos). IMCP > Normatividad > Normatividad CONIF > Flujos de Efectivo Normatividad CONIF
aceptan para aprovechar las variaciones del mismo, especialmente si creemos que los tipos van a subir y tenemos nuestras inversiones a tipo fijo. Derivados 'forex ' , son aquellos que intervienen en el tipo de cambio de moneda. En este tipo de derivados se suelen hacer opciones o futuros sobre una moneda distinta a la propia o incluso con dos monedas ajenas. Por ejemplo, una opción de compra de reales brasileños con libras esterlinas ejecutada por un banco en Tokio. Derivados sobre 'equities y commodities' , son derivados cuyo valor depende de un activo intercambiado en los mercados de valores , por ejemplo acciones o bonos. No obstante también se suelen ver opciones sobre materias primas, como el petróleo o el oro. Los más comunes son las opciones, los futuros o 'warrants'. Derivados de crédito , son derivados que se refieren al riesgo de un crédito o un bono. Justamente, se habló mucho de estos durante la crisis de deuda soberana y el valor de los 'Credit Default Swap'. También son conocidos los CDOs que se utilizan para garantizar créditos. Otros derivados , entre estos tenemos derivados de emisiones de CO2, derivados de inflación, etc. En general, no se puede negar que los derivados de hoy en día son una parte fundamental de las finanzas modernas, así como de su fuerte impacto sobre la economía. 1.2. Concepto de empresa Es evidente que en nuestra disciplina nos interesa estudiar la perspectiva económica de la empresa. Si la Economía es la ciencia que estudia la asignación eficiente de los recursos escasos, es obvio que en el concepto de empresa primero subyace claramente este problema, considerándose como un agente que organiza con eficiencia los factores económicos para producir bienes y servicios para el mercado con el ánimo de alcanzar ciertos objetivos. (Entendemos por eficiencia, la capacidad o cualidad de un agente económico para lograr el cumplimiento de un objetivo, minimizando en lo posible el empleo de recursos).
En una segunda observación dentro de este campo, nos interesa el aspecto interno o administrativo , como conjunto de elementos humanos, técnicos, financieros y de marketing, ordenados según determinada jerarquía o estructura organizativa y que dirige una función directiva o empresario. Como señalábamos en la introducción, la empresa puede ser estudiada por medio de varias dimensiones. Cada una de estas dimensiones puede utilizarse, como de hecho así ha sido, para ofrecer un concepto determinado de empresa, aunque muestre sólo uno de los aspectos que caracterizan a la misma. La dimensión funcional representa la justificación del papel que la empresa juega en la economía de mercado. La dimensión técnico-económica se concentra en el proceso de transformación productiva, explicada por unas funciones de producción y de coste. La dimensión económico-financiera acerca la empresa a una concepción característica del capitalismo financiero, es decir como unidad creadora de valor (de riqueza) y, en consecuencia, de movimientos de capital (de dinero) a través del mercado en general y, en particular, de los propios mercados financieros. La dimensión jurídico-mercantil parte de la consideración de la empresa dotada con personalidad jurídica para contratar como sociedad mercantil con otros agentes y propietarios de factores económicos. La dimensión social , está asociada a las relaciones existentes entre un grupo de seres humanos. A cada una de estas dimensiones conceptuales, se les puede hacer corresponder las siguientes características definitorias de la empresa como unidad económica: La empresa es una organización: dotada de una estructura interna según determinada relación de autoridad o con una «jerarquía», es decir, con una función directiva o empresarial, por la que pretende la consecución de unos objetivos, normalmente, la obtención del excedente o beneficio empresarial. La empresa es una unidad de producción: combinando un conjunto de factores económicos, según una acción planeada y que a través de un proceso de transformación obtiene unos productos o servicios. La empresa es una unidad financiera: dotada de un capital, según determinada estructura de propiedad, de forma que desarrollará un conjunto de transacciones financieras que le llevarán a un crecimiento sostenido y equilibrado. La empresa es una unidad de decisión o de dirección: con capacidad de formulación de sus objetivos, y de gestión de los mismos a través del desarrollo de unas funciones características (directivas) marcando las pautas a seguir por la organización. La empresa es un sistema social: conjunto de personas que mantienen unas relaciones formales e informales, una comunicación, con sus correspondientes motivaciones y comportamientos individuales y de grupo, configurando determinada cultura y relaciones de poder.
Sí la empresa ha sido inicialmente definida como un conjunto de elementos interrelacionados que persiguen un plan común o unos mismos objetivos, es preciso detenerse unos instantes en la composición de la misma para poder percibir mejor la realidad socioeconómica de la organización. Como se ha demostrado en el epígrafe precedente, la empresa integra en una determinada estructura dirigida por una autoridad, los factores productivos disponibles según unos contratos, pagando unas rentas o precios por su utilización. Según cuál sea el papel que desempeñan los factores económicos o productivos en el proceso de transformación de valor que la empresa desarrolla para cumplir su función y lograr los objetivos propuestos, se pueden clasificar en dos grandes grupos los factores pasivos , o bienes económicos, y los factores activos o las personas. Los factores pasivos representan los recursos económicos clásicos (tierra y capital), sujetos a la característica de la escasez o de su disposición limitada. En la actualidad estos factores, dadas las condiciones de los procesos productivos, se pueden clasificar en estas categorías: · Capital financiero o recursos financieros líquidos · Capital técnico: · Tangible: · Inversiones técnicas o bienes de equipo e informáticos · Materiales y mercancías (productos elaborados, componentes o kits) · Intangible: · Tecnología y software informático. De la anterior clasificación se desprende que los bienes económicos pueden ser clasificados tanto por su naturaleza tangible o intangible, como por su temporalidad: duraderos o inversiones, y no duraderos o corrientes; los primeros vinculados al ciclo de capital de la empresa y los segundos a su ciclo de explotación, el cual deberá apoyarse en la estructura económica que las citadas inversiones representan. Volviendo sobre la tangibilidad de los bienes, hay que mencionar que en los momentos actuales, los intangibles, caso de los desarrollos tecnológicos o el derecho a usar la tecnología y el correspondiente software informático, soporte de la mayoría de los procesos de transformación física y de los procesos administrativos, están representando un valor muy relevante sobre el total de la inversión en capital de la empresa. En suma, ello sólo viene a afirmar la importancia de la tecnología en la competencia actual de la empresa. En cuanto a los factores activos, en principio menos limitados ya que pueden ser desarrollados con una adecuada dirección de recursos humanos o de
personas representan el concepto clásico de la fuerza de trabajo o el moderno de capita humano o de grupo humano. Dentro del capital humano se pueden diferenciar grupos de personas en relación a sus intereses, papel y relaciones con la empresa. Tal es el caso, como queda reflejado en la figura 1.1 , de los propietarios del capital de la empresa, (ya sea con ánimo de control o simples inversores financieros), los empleados o trabajadores y los directivos o administradores. Es evidente que hay que añadir un tercer tipo de factor para completar la concepción moderna de la empresa, como es el empresario, o también conocido en economía por la organización. Concepto que se puede vincular al grupo de los propietarios o de los directivos, según cual sea el grado de separación entre la propiedad y la administración, tal y como se abordará en temas posteriores. En definitiva, la organización surge como un conjunto de relaciones de autoridad, de jerarquía, de coordinación y de comunicación entre los factores activos y en conexión con los factores pasivos. Estructura que define el empresario y que le permite integrar a todos los factores y dirigir la producción. En muchas ocasiones, dada la estrechez o cercanía de las relaciones con proveedores o suministradores y con clientes, y especialmente por el poder de negociación que los mismos tengan, parecería lógico considerarlos como otros grupos dentro de los factores activos_._ En principio esta decisión no es aceptada, por entender que pertenecen al entorno de la empresa, pero sí hay que tenerlos muy en cuenta en la forma de administrar si se quiere responder a planteamientos de eficiencia frente al mercado. 1.4. Evolución histórica del concepto de empresa De una forma resumida se aborda en este epígrafe cuál ha sido la evolución de la empresa como órgano del sistema de economía capitalista o de mercado. No se va a entrar en muchos detalles, pues corresponden más a una disciplina como la historia económica. Como es sabido, el sistema económico capitalista pasa por cuatro modelos de organización económica conocidos como: feudalismo, capitalismo mercantil o mercantilismo, capitalismo industrial y capitalismo financiero. En cada uno de ellos la empresa ha tenido sus orígenes y su correspondiente evolución como órgano básico del citado sistema, pasando de un modelo y configuración simple a la actual situación de complejidad que expresa el modelo de «empresa como organización».
Cuando se habla de tipos de contabilidad de una empresa, todas las sociedades de la empresa tienen claro qué es la contabilidad general, y para qué sirve. Pero dentro de la contabilidad de la empresa podemos encontrar varias ramas especializadas en fases concretas, que pueden ser muy útiles en función de las necesidades y objetivos de la empresa. En este artículo te explicamos siete tipos de contabilidad a tener en cuenta. Contabilidad financiera Se utiliza sobre todo para obtener información cuantitativa de tipo financiera de forma estructurada, a través del balance de situación y el balance de pérdidas y ganancias. Con esto, podemos llevar un histórico de la vida económica de nuestra empresa. Es útil y necesaria cuando se tiene que presentar estados contables de forma estandarizada a inversores, entidades públicas u otros organismos interesados. Por lo tanto, no está enfocada a la gestión empresarial. Con este tipo de contabilidad de empresa se pueden obtener datos en unidades monetarias de interés a nivel financiero, como solvencia, liquidez, apalancamiento, solidez, rentabilidad económica o ciclo de caja entre otros. Contabilidad fiscal Este tipo de contabilidad de una empresa se basa en los criterios fiscales establecidos por la ley, y regula la forma de hacer los registros e informes para la declaración y el pago de tributos. La contabilidad fiscal puede ser distar mucho de la financiera, por las grandes diferencias existentes entre los principios contables y las leyes financieras. Contabilidad de gestión También llamada contabilidad directiva, recopila información del mismo tipo que la contabilidad financiera, pero para un uso interno, y además de forma normalmente más exhaustiva. Permite el control de la sociedad y el cumplimiento de los objetivos estratégicos de ésta. También permite un análisis de la evolución de la empresa, puesto que puede incluir resultados de ejercicios anteriores. Así, resulta ser una herramienta básica para la planificación óptima de la gestión empresarial. Contabilidad gerencial También llamada contabilidad administrativa, es una herramienta dentro de los tipos de contabilidad de una empresa que tiene el objetivos de evaluar, identificar y proporcionar información sobre la actividad económica de la compañía. Su uso es exclusivamente interno, ya que se utiliza para adaptar la información contable a las necesidades de la administración de la empresa.
Suele expresarse casi siempre en unidades monetarias, si bien no está regulada, al tratarse de un proceso que no trasciende de la sociedad. Contabilidad de costes Esta contabilidad de una empresa clasifica, contabiliza, distribuye y recopila información sobre los costos que genera la compañía, además de ocuparse de la gestión de los costes futuros previstos. Este tipo de contabilidad engloba el diseño y la operación de procedimientos de costos; la determinación de costos por departamentos, funciones, responsabilidades, actividades, productos, territorios, periodos y otras unidades; la comparación de los costos de diferentes periodos; de los costos reales con los costos estimados, presupuestados o estándar, y de los costos alternativos, entre otros conceptos. Contabilidad por actividad Se trata de una contabilidad que une la contabilidad administrativa y la de costes, aunque también se puede considerar como un modelo de contabilidad de costes. Busca operar y clasificar las cuentas que cada una de las actividades, para mejorar la productividad de la empresa. Esta herramienta es muy útil en la toma de decisiones, puesto que hace un retrato fidedigno de la situación de la sociedad, pero resulta difícil de realizar por la cantidad de factores que tiene en cuenta. Contabilidad de organización de servicios Se trata de un tipo particular de contabilidad de empresas que proporcionan servicios, y no bienes, como bancos, hoteles, consultorías, empresas de transporte, etc.
1. DIVISIÓN DE LA CONTABILIDAD Para lograr un adecuado estudio de la Ciencia Contable recomendamos la siguiente división : 1.1 Contabilidad Financiera 1.1.1 Sistema de Registración Contable 1.1.2 Teoría Contable 1.1.2.1 Diseño de Sistemas Contables 1.1.2.2 Diseño de sistemas de Costos
operaciones que probablemente ocurrirán acorde con los requerimientos empresariales y disposiciones legales. 1.1.2.2 Diseño del Sistema de Costos El costeo es parte especializada de la contabilidad y tiene por finalidad, determinar en términos de unidades monetarias el costo de producción y de venta, como el precio de venta de los artículos producidos o importados, siendo sus principales elementos la materia prima (indispensable para la fabricación o transformación de un determinado producto), la mano de obra (fuerza de trabajo utilizada por los departamentos en la transformación de un determinado producto), la mano de obra (Fuerza de trabajo utilizada por los dependientes en la transformación de un determinado producto) y los gastos de fabricación (elementos originados e incorporados al momento de la transformación de un determinado artículo o producto). 1.1.2.3 Formulación de Presupuestos Conocido también como programa numérico, consiste en efectuar cálculos estimados, con seguridad más o menos relativa, a cerca de las operaciones clasificadas en planes, programas y tareas que habrán de efectuarse en un futuro inmediato, utilizando para tal efecto información estadística anterior, como también la incorporación de proyectos. 1.1.3 Auditoría Es una parte especializada de la Contabilidad, posee una metodología técnicamente adelantada, plasmada en un plan de trabajo que incluye programas específicos, para un mejor estudio la auditoría se sub-divide en:
Conocida también como contabilidad gerencial, se encarga de estudiar problemas específicos que enfrenta la gerencia en una empresa en diferentes niveles, encontrándose con el problema de identificar alternativas o cursos de acción para determinar el más apropiado. Por tanto, este servicio es altamente especializado para asesorar a la gerencia sobre prácticas y administración. CONCLUSIÓN DEL ARTÍCULO “ DIVISIÓN DE LA CONTABILIDAD ” Las dos principales áreas de la Contabilidad son la Contabilidad Financiera y la Contabilidad Administrativa o Gerencial. La Contabilidad Financiera se ocupa principalmente de los estados financieros para uso externo de quienes proveen fondos a la empresa y de otras personas que pueden tener intereses creados en las operaciones financieras de la empresa. Entre los proveedores de fondos se incluyen los accionistas (propietarios de la firma) y los acreedores (los que proporcionan préstamos). La información financiera se limita a las operaciones de la empresa como una totalidad, con pequeñas referencias a las operaciones de cada una de las líneas de producto o unidades de negocios. La Contabilidad Administrativa se encarga principalmente de la acumulación y del análisis de la información relevante para uso interno de los gerentes en la planeación, el control y la toma de decisiones. Fuentes Consultadas: [1]: Terán Gandarillas Gonzalo J. TEMAS DE CONTABILIDAD BASICA E INTERMEDIA. 4ta Edición. Editorial Educación y Cultura. [2]: Ayaviri, García Daniel. CONTABILIDAD BÁSICA Y DOCUMENTOS MERCANTILES. 1ª Edición. Editorial “N-DAG”. [3]: Sydney, Davidson & Roman, L. Weil. BIBLIOTECA MCGRAW-HILL DE CONTABILIDAD. Tomo I; Edición 3º; Editorial MCGRAW-HILL. [4]: FUNES Orellana, Juan; El ABC de la Contabilidad; Editorial “SABIDURIA”; Edición 2003.
Imputación directa: Comprende el precio de compra de las materias primas o servicios que se imputan de forma directa a cada unidad producida. Guardan relación con los conocidos como costes directos. Imputación indirecta: Son aquellos costes que se imputan de forma indirecta al producto, como por ejemplo el alquiler del local, los gastos de la línea telefónica, etc. OBJETIVOS DE LA CONTABILIDAD DE COSTES La contabilidad de costes tiene como finalidad proporcionar información para realizar una adecuada planificación interna a corto, medio y largo plazo. Permite realizar una valoración de los costes no solo por unidad de producto, si no también para valorar los costes de cada parte del proceso productivo y de las diferentes áreas de la organización implicadas en dicho proceso. La contabilidad de costes también nos permite analizar los beneficios obtenidos por unidad , para así poder decidir qué y cuánto producir. Esto también nos ayudará a calcular un ratio esencial como es el umbral de rentabilidad , que representa el punto en el cual los ingresos de la empresa se igualarán a los costes y el beneficio será igual a 0. A partir de este umbral, la empresa comenzará a obtener beneficios económicos. Por ello, el análisis de la contabilidad de costes nos ayudará a estudiar con detalle todas estas variables económicas que nos conducirán a una mejor planificación empresarial. Gracias a la realización de la contabilidad de costes podemos analizar los resultados obtenidos para definir diversas estrategias que ayuden a la empresa a incrementar su beneficio económico. También podremos monitorizar la gestión interna para revisar si se están cumpliendo los objetivos establecidos o si el rumbo de la organización se ha desviado, para poder realizar cambios que nos vuelvan a reconducir hacia los objetivos iniciales. DIFERENCIAS ENTRE LA CONTABILIDAD FINANCIERA Y LA CONTABILIDAD DE COSTES La contabilidad interna o contabilidad de costes se diferencia de la contabilidad externa o contabilidad financiera en diversos aspectos: Obligatoriedad: La contabilidad financiera es de carácter obligatorio, frente a la contabilidad de costes que es voluntaria; a pesar de ello, esta última se
complementa a la perfección con la primera y es por ello que a pesar de no ser obligatoria se convierte en una herramienta imprescindible para realizar un correcto y completo análisis de la contabilidad de la empresa. Regulación: La contabilidad financiera está regulada por el Plan General Contable y el Código de Comercio. La contabilidad de costes no tienen ninguna regulación y se diseña según las necesidades de cada empresa. Objetivo: La contabilidad financiera se utiliza para llevar un registro pormenorizado de toda la actividad económica y financiera de la empresa, además de suministrar información a terceros. La contabilidad de costes se utiliza como una herramienta que guiará a la organización en la toma de decisiones. Destinatarios de la información: La información que arroja la contabilidad financiera será utilizada por la propia empresa y también por otros organismos como Hacienda o la Seguridad Social y terceros como pueden ser acreedores, entidades financieras, inversores, accionistas, etc. La contabilidad de costes servirá como instrumento para guiar a los directivos en la toma de decisiones. Soporte de la información: La contabilidad financiera recoge su información en los libros contables y otros documentos, mientras que la contabilidad de costes puede elaborarse siguiendo el esquema que la organización considere, tanto en soportes físicos como digitales. Estas dos contabilidades se complementan a la perfección y sirven de apoyo en la toma de decisiones estratégicas para la empresa. La contabilidad financiera necesita nutrirse de la información analítica que aporta la contabilidad de costes y esta necesita los datos que le aporta la contabilidad financiera para poder realizar el estudio de los costes de la organización. ¿QUIÉN PUEDE BENEFICIARSE DE LA REALIZACIÓN DE LA CONTABILIDAD DE COSTES? Ya que la contabilidad de costes no tiene un carácter obligatorio , cada organización puede tomarla de forma voluntaria y aplicarla a su negocio. Hasta hace pocos años, esta herramienta contable también se conocía como “contabilidad industrial”, ya que era utilizada por la gran mayoría de las empresas industriales para realizar el análisis de los costes de su producción. Con el paso del tiempo el uso de la contabilidad de costes se ha ido normalizando y aplicando en multitud de empresas de todo tipo de sectores, independientemente de que vendan productos o servicios, y que desean realizar un control y un análisis exhaustivo de su contabilidad, convirtiéndose en una herramienta fundamental en la toma de decisiones empresariales.