























































Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity
Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium
Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity
Prepara tus exámenes con los documentos que comparten otros estudiantes como tú en Docsity
Los mejores documentos en venta realizados por estudiantes que han terminado sus estudios
Estudia con lecciones y exámenes resueltos basados en los programas académicos de las mejores universidades
Responde a preguntas de exámenes reales y pon a prueba tu preparación
Consigue puntos base para descargar
Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium
Comunidad
Pide ayuda a la comunidad y resuelve tus dudas de estudio
Descubre las mejores universidades de tu país según los usuarios de Docsity
Ebooks gratuitos
Descarga nuestras guías gratuitas sobre técnicas de estudio, métodos para controlar la ansiedad y consejos para la tesis preparadas por los tutores de Docsity
Tipo: Apuntes
1 / 63
Esta página no es visible en la vista previa
¡No te pierdas las partes importantes!
I. Presentación
El Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH), es una organización de la sociedad civil hondureña que durante 25 años ha impulsado acciones de promoción e incidencia en políticas públicas y la participación ciudadana para fomentar la vigencia plena de los derechos humanos en Honduras.
Durante su trayectoria en estos 25 años de trabajo, el CIPRODEH ha revisado y reestructurado constantemente sus objetivos y estrategias de acción, como elementos imprescindibles para adaptar su quehacer a los nuevos desafíos que los derechos humanos y las libertades ciudadanas, enfrentan en Honduras y la región. De esta manera, el CIPRODEH se consolida como una organización con liderazgo y compromisos renovados que le permiten avanzar en la realización de su ideario institucional y contribuir a la construcción de cambios estructurales en la sociedad y el Estado hondureño, a fin de realizar el ideal común establecido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el cual demanda a todos los pueblos y naciones, esforzarse por que todos los seres humanos nazcan (y vivan) libres e iguales en dignidad y derechos.
En virtud de lo antes expuesto, este documento define los propósitos y enfoques que orientarán el trabajo del CIPRODEH durante el período 2015-2018. Como cambios fundamentales, durante el nuevo período de planificación estratégica, el CIPRODEH redefine su visión y misión institucional; establece nuevos programas de trabajo y, propone una reorganización de su estructura técnico-operativa; con el propósito de lograr una mayor articulación y visión de integralidad del trabajo en sus distintos espacios organizativos. Los cambios propuestos, se sustentan en el análisis realizado acerca del entorno y la problemática de los derechos humanos a nivel nacional e internacional; las lecciones aprendidas durante el período anterior y, al mismo tiempo, son una respuesta a las necesidades de cambios institucionales que el personal programático, administrativo, Junta Directiva y la Asamblea General; reflejaron durante el proceso de construcción de este plan.
Toda esta información sirvió para la redefinición del marco estratégico compuesto por los objetivos y resultados clave, junto a sus respectivos indicadores de medición.Asimismo, este Plan Estratégico, brinda un mayor impulso a acciones importantes como la defensoría y litigio estratégico en DDHH, la investigación especializada y, el trabajo desde la perspectiva de los Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (DESCA). También, continúan siendo temas centrales del trabajo de la organización, la incidencia en políticas públicas; la organización comunitaria y el trabajo redes con grupos en situación vulneración a sus derechos; así como, el fomento de la participación ciudadana en la gobernabilidad democrática, los espacios de convivencia social y, las acciones en materia de seguridad ciudadana integral.
Finalmente, el proceso de planificación, establece el plan de acción, el proceso global de monitoreo, evaluación y sistematización de los resultados, así como una estimación general de los recursos requeridos para viabilizar la apuesta estratégica de la organización para el siguiente período de cinco años.
II. Antecedentes
El Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos inició su trabajo en 1989, partiendo del propósito de convertirse en una organización de la sociedad civil que generara acciones de gestión del conocimiento e incidencia en políticas públicas orientadas al afianzamiento de una cultura de derechos humanos en Honduras. Esto sucedió una vez que el país dejó atrás las dictaduras militares, substituyéndolas por gobiernos electos por el voto directo. No obstante, en ese momento, la joven democracia hondureña mantenía un estancamiento en materia de derechos humanos, lo cual motivaba amplias expectativas para alcanzar una mayor participación ciudadana en la dirección que el Estado debía tomar para garantizar que el fin supremo de la sociedad fuese la persona humana; convirtiendo esta situación en la coyuntura especial que dio pie al surgimiento de la organización.
Durante estos 25 años, el CIPRODEH ha desarrollado un amplio compromiso, respeto y credibilidad hacia su trabajo, por parte de distintas organizaciones y movimientos sociales en el país. Organizaciones a quienes ha acompañado en sus reivindicaciones y articulación de esfuerzos para democratizar integralmente la sociedad hondureña y fortalecer el Estado de derecho. Del mismo modo, ha trabajado de cerca con quienes tienen la responsabilidad de tomar decisiones para atender las necesidades y la problemática que, en el ámbito de los derechos humanos, afectan a la población hondureña. Por tanto, el compromiso con la justicia y el desarrollo pleno de la persona, se encuentran fuertemente anclados en los principios que durante su existencia institucional, el CIPRODEH ha promovido.
Hoy en día, el CIPRODEH, es una organización de carácter nacional y profesional; enfocada en ejercer un liderazgo protagónico en la realización de actividades investigación, promoción e incidencia en derechos humanos; cuyo propósito original fundamentado en construir una sociedad democrática, justa y respetuosa de los derechos humanos, continúa vigente.
En este marco de aspiraciones y desafíos que cambian constantemente, el CIPRODEH, realiza su tercer ejercicio de planificación estratégica formal, consciente de que ahora más que antes, se precisa de una organización que brinde respuestas efectivas a los retrocesos que el Estado ha tenido en materia de derechos humanos e institucionalidad democrática, después del golpe de Estado de 2009. Tomando en cuenta estos nuevos escenarios, las personas que integran la organización asumen un mayor compromiso por fortalecer el trabajo que se ha venido desarrollando; trazándose nuevos objetivos a cumplir en los próximos cinco años, iniciando este nuevo desafío a partir de enero de 2015, concluyendo en diciembre de 2018, fecha en que deberá reiniciar un proceso de análisis y planificación estratégica para un siguiente período.
Pese a que han transcurrido 5 años desde la ruptura del orden constitucional y, contrario a lo que se cree en el ámbito internacional; a lo interno del país, la ciudadanía en general y los analistas especializados, denuncian mayores retrocesos en las instituciones democráticas y de justicia, que los provocados por el mismo golpe de Estado y que; una parte de la comunidad internacional, cree resueltos con los Acuerdos de Cartagena mediante los que se zanjó la llamada “crisis política”, con el retorno del expresidente derrocado y la fundación del Partido Libertad y Refundación, como representante político de la oposición al golpe de Estado.
El fracaso del sistema democrático hondureño y la consolidación de la era post-golpe de Estado, está caracterizada por una mayor represión y agudización de la crisis política, económica y social que, en los últimos cinco años, se ha distinguido por: Los dos gobiernos surgidos después del régimen de facto de 2009, han carecido de legitimidad y un amplio respaldo popular. El gobierno de Porfirio Lobo surgió en medio de un proceso electoral que no reunió las condiciones mínimas y la veeduría ciudadana nacional e internacional, como para garantizar que haya sido electo de forma transparente; esto llevó a que tardara más de un año para lograr su reconocimiento pleno por parte de la comunidad internacional. De igual forma, el nuevo gobierno de Juan Orlando Hernández, asume el 27 de enero de 2014, en el marco de un proceso electoral ampliamente cuestionado, en cuanto a su transparencia, por una buena parte de la ciudadanía y las organizaciones democráticas nacionales e internacionales. Desde 2009, las principales carencias de las mayorías empobrecidas (salud, alimentación, vivienda, educación y seguridad ciudadana) no han sido resueltas. Por el contrario, los nuevos ajustes estructurales a la economía de corte neoliberal y el impacto que produjo el golpe de Estado, han contribuido a elevar en casi tres puntos porcentuales la pobreza, ya que según datos del PNUD/Banco Mundial de 2012, en tan sólo 4 años la pobreza absoluta pasó de 65.6% a 68%. Esto ha exacerbado la desigualdad social y ha incrementado el índice de desigualdad de Gini que acrecienta la brecha y pasa del 0.56 al 0.58. Las condiciones y calidad de vida de la población se han reducido en áreas como las fuentes de empleo estable y digno, a consecuencia de la Ley de Empleo Por Hora; las imposiciones fiscales y el encarecimiento de la “canasta básica” de alimentos; el incremento de la inflación y pérdida del poder adquisitivo de la economía familiar; así como, la crisis del sistema educativo, marcada por un constante enfrentamiento del gremio magisterial con el gobierno de Honduras y; la crisis del sistema hospitalario público que ha perdido capacidad de cobertura y atención eficiente a la ciudadanía en general. El Estado desarrolla nuevas facetas de una política fiscal enfocada al incremento de las cargas impositivas indirectas que afectan a la mayoría de la ciudadanía y la consolidación de las exoneraciones fiscales para grupos de poder económico nacional y transnacional, generando con ello mayor corrupción, pobreza e injustica económica. Las medidas neoliberales vinculadas a la pérdida de la soberanía económica y territorial, enmarcada en el proyecto de las Zonas Especiales de Desarrollo Económico (ZEDE), se afianzan en los dos últimos años del gobierno de Porfirio Lobo Sosa y han comenzado a ponerse en marcha en los primeros meses del gobierno de Juan Orlando Hernández. Una multiplicidad de factores se han asociado para convertir a Honduras en uno de los países con mayores tasas de violencia social, llegando en 2013 a 79 muertes violentas por cada 100 mil
habitantes ( Datos del Observatorio de la Violencia UNAH-IUDPAS, 2013 ). Una buena parte de esta violencia es el resultado del afianzamiento del crimen organizado y la penetración de la narcoactividad en las distintas esferas de la sociedad y las instituciones del gobierno, lo cual desarrolla un amplio entramado de corrupción e impunidad para los crímenes relacionados con esta actividad delictiva. El conflicto agrario-campesino y la concentración de la tierra en un grupo de terratenientes, se incrementó desde la aprobación de la Ley de Modernización Agrícola en 1990 y, desde el golpe de Estado se ha agudizado, dejando más de 90 campesinos y campesinas asesinadas, sólo en el conflicto de tierras en el Bajo Aguán, desde 2010 a la fecha ( Informe Estadístico de Muertes Violentas Relacionadas al Conflicto de Tierras del Bajo Aguán 2008-2013; del Observatorio Permanente de DDHH del Bajo Aguán ). Asimismo, Honduras se ha convertido en un país con distintos riesgos ambientales como consecuencia de los conflictos por las tierras, las concesiones mineras, licencias ambientales para la explotación de recursos renovables como bosque y agua a compañías transnacionales y la generación de energía eléctrica sucia (generación térmica), lo cual ha generado mecanismos de represión y persecución hacia los sectores de la ciudadanía que reclaman el control de la soberanía popular, la defensa del territorio y los bienes comunes de la naturaleza, tales como organizaciones indígenas y comunales. La principal consecuencia de este modelo capitalista depredador, ha sido la vulneración de los ecosistemas y del derecho a un medioambiente sano, así como la falta de políticas ambientales concertadas con los sectores afectados por este tipo de actividad económica.
Desde el golpe de Estado, el país ha enfrentado una seria crisis en materia de derechos humanos. Esta crisis ha sido ampliamente evidenciada en los informes y denuncias que diferentes organismos nacionales e internacionales de derechos humanos han realizado desde entonces. Estas organizaciones, establecen sendos llamados de atención al Estado de Honduras, demandando el restablecimiento de las condiciones mínimas para el afianzamiento del Estado de Derecho; la justiciabilidad y la protección de los derechos humanos, las libertades y garantías constitucionales de toda la población hondureña .Contrario a esto, desde la ruptura del orden constitucional, la situación de los derechos humanos se ha vuelto más compleja y sensible; especialmente para las distintas organizaciones y movimientos sociales del país.
Para el CIPRODEH, la difícil situación que atraviesan los derechos humanos en Honduras, posee diferentes manifestaciones interrelacionadas, teniendo como principal causa, la pérdida y el debilitamiento de la institucionalidad que el Estado debería proporcionar para cumplir con su rol de garante de los derechos de toda la ciudadanía. En su análisis, la organización establece que el deterioro de las condiciones para la vigencia de los derechos humanos se vincula a las siguientes causas: Incumplimiento de los compromisos, políticas, tratados y convenios internacionales firmados por el Estado en materia de derechos humanos. El Estado hondureño ha desatendido las recomendaciones establecidas por la Comisión de la Verdad y las demandas de la Comisión de Verdad, así como una buena parte de los requerimientos del Examen Periódico Universal (EPU) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos; todos
Debilitamiento de la institucionalidad democrática y los espacios ciudadanos de incidencia para la generación de cambios a favor de los derechos humanos y el desarrollo humano.
Este entorno poco favorable para los derechos humanos de la población en general tiene un amplio impacto en el trabajo del CIPRODEH. En las actividades de consulta de este proceso de planificación estratégica, la organización estableció que el contexto actual presenta los siguientes desafíos para su trabajo futuro: Situaciones de alto riesgo para la seguridad e integridad del personal y la organización en sí misma. Esta es una situación también afecta a otras y otros defensores y defensoras de derechos humanos. El CIPRODEH se convierte en un referente para los grupos afectados por la violencia social y política, especialmente por el trabajo que la organización desarrolla en materia de seguridad ciudadana; lo cual obliga a la organización a renovar constantemente sus servicios de asistencia y apoyo a las víctimas de esta problemática social. El incremento del desplazamiento forzado de personas debido a la violencia, genera mayor demanda de recursos y cobertura del trabajo organizacional. Incremento de las denuncias sobre violaciones a los DDHH. En este tipo de violaciones se encuentran involucrados, principalmente, integrantes de la Policía Nacional, el Ministerio Público y el Poder Judicial. Además, esto plantea un escenario difícil para la organización, desde la perspectiva del relacionamiento e incidencia política que históricamente ha venido desarrollando con estas instancias. Incremento de la demanda ciudadana para la protección de sus derechos y el adecentamiento del sistema de impartición de justicia (acceso a la justicia). En algunos momentos, esto desborda las capacidades institucionales del CIPRODEH, lo cual implicará para la organización cambios y reorganización, en este ámbito. La remilitarización de la sociedad y las instancias gubernamentales, más un proceso fallido de depuración de las instancias de seguridad y justicia; ha inducido condiciones de mayor riesgo a la seguridad ciudadana (muertes violentas, feminicidios, desapariciones forzadas, robos, asaltos, impunidad, etc.); el incremento a las violaciones a los derechos humanos y el incremento a la criminalización y represión política de los movimientos sociales con que la organización trabaja (Indígenas, campesinos, mujeres, ambientalistas y grupos LGTB). Dentro de los segmentos de la población que se encuentran en situación de alta vulnerabilidad están las mujeres, quienes a raíz de la ola golpista de 2009, han tenido que enfrentar retrocesos en sus derechos humanos y son uno de los sectores más golpeados por la violencia social en el país. Para la organización, esto implicará fortalecer el trabajo desde una perspectiva más clara de equidad de género y desarrollar sus alianzas con organizaciones especializadas en el tema para aprender y adaptar a su trabajo institucional el enfoque de igualdad de derechos desde esta perspectiva. Pérdida de la vigencia y violaciones sistemáticas a los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales de la ciudadanía hondureña. Se ha puesto en peligro la soberanía e integridad territorial del Estado mediante la entrega de los recursos naturales en el marco de concesiones y las zonas especiales de desarrollo (ZEDES). Consecuentemente se pondrá en alto riesgo, la capacidad del Estado para garantizar y proteger los
derechos humanos de la ciudadanía de esos territorios, lo cual debería implicar estrategias de atención focalizadas en estos territorios antes de la materialización de las ZEDE. Pérdida de la credibilidad de la ciudadanía en las instituciones de gobierno y consecuente desinterés o apatía para participar en procesos de reivindicación de los derechos humanos. Esto se vincula, especialmente a que la población prioriza situaciones de sobrevivencia, al involucramiento en acciones de participación ciudadana en materia de derechos humanos. La inestabilidad y polarización política entorpece el trabajo de incidencia y defensoría de derechos humanos que el CIPRODEH realiza.
De esta manera, el modelo de gobiernos autoritarios que han venido consolidándose en los años posteriores al golpe de Estado plantea, para los derechos humanos y la organización misma; el desafío de contar con una ciudadanía deliberante, veedora y movilizada para transformar estructuralmente el modelo de democracia construida desde arriba hacia abajo, cuestionando la democracia de las élites políticas y económicas; a fin de dar paso al surgimiento de nuevos espacios de movilización popular y social que exija una transformación política y soluciones democráticas a los problemas de los sectores discriminados y excluidos, razón por la cual, el CIPRODEH como organización civil que trabaja en los derechos humanos, deberá mantener y consolidar su papel en relación con esta nueva cultura cívica, política y de derechos que la población hondureña aspira construir.
Además del análisis organizacional, en las actividades de consulta, se facilitó la realización de un análisis FODA que sirvió para reforzar el análisis externo e interno de la organización. A continuación se establecen los principales resultados del análisis organizacional y del FODA, de manera combinada. Estos dos instrumentos arrojan resultados que sirven como elementos orientadores para la planificación acerca de la consolidación de la institucionalidad y capacidades de trabajo del CIPRODEH en la temática de derechos humanos.
a. El SER del CIPRODEH : Luego de la valoración realizada en el primer taller de consulta, en una escala de 1 a 4, el personal de la organización concuerda que en forma global las distintas variables que se analizaron suman 2.3, es decir, una calificación baja como para determinar que los aspectos estratégicos de la organización logren llevarse a la práctica sin dificultades. De acuerdo a la percepción de los distintos niveles organizativos del CIPRODEH, ésta deberá ser el área en que deben enfocarse las acciones de fortalecimiento de la organización.
Resaltan como mayores desafíos y necesidades de esta dimensión: Los distintos niveles organizativos Asamblea, Junta Directiva y personal técnico; necesitan apropiarse (más allá de conocer) de los elementos estratégicos orientadores de la organización. Es decir, apropiarse del propósito, valores y estrategias de la organización, en conexión con las acciones más operativas o de primera línea, denominadas “proyectos en ejecución”. Es necesario recalcar que pese a que la mayoría del personal tiene cinco años o más laborando para el CIPRODEH; la mayoría de ellos y ellas, reconocen que no conocen los estatutos de la organización y que tampoco conocen cuál es la misión y visión institucional; sus objetivos estratégicos y valores promovidos; reduciendo su participación dentro de la organización en función de los objetivos del proyecto que tiene bajo su responsabilidad, pero sin establecer la integración y articulación con el resto del ser organizacional y sus metas. Finalmente, la articulación y comunicación entre los distintos niveles organizativos: Asamblea, Junta Directiva. y personal técnico, no está resultando en sinergias que permitan establecer prioridades consensuadas, así como asumir las responsabilidades y decisiones políticas de manera plena. El órgano directivo, carece de una planificación estructurada y los vasos comunicantes con el personal, son limitados, lo cual ha reducido la visión de integralidad a lo interno de la organización.
Como efecto de esta situación, la visión estratégica integral de la organización; el funcionamiento y articulación entre los órganos de dirección política de la organización y la capacidad de responder estratégica y coherentemente a la problemática de derechos humanos se ve reducida y limitada visiblemente. Esto implicará que, para el nuevo período, la organización en su conjunto tendrá que fortalecer y trabajar en una nueva estructura de relacionamiento y de seguimiento al cumplimiento de funciones y responsabilidades desde una perspectiva en consonancia efectiva con la misión, visión y los objetivos organizacionales.
b. El HACER del CIPRODEH: Esta dimensión, presenta resultados mixtos al momento de realizar el análisis por parte de los niveles consultados. La valoración global de esta área es de 3/4 puntos máximos; lo que equivale a un desarrollo medio-alto. Los puntos a fortalecer y que resaltan en esta dimensión se vinculan a: En concordancia con la dimensión anterior, el personal no conoce en qué área o eje estratégico se enmarca su proyecto, o bien, a qué objetivo estratégico, su iniciativa contribuye a materializar. Resulta evidente que el personal programático y administrativo se ha centrado en el activismo y las tareas del día a día (“ islas de trabajo ”), las cuales, aunque sean desarrolladas de forma eficaz y eficiente, no garantizan la consecución de objetivos institucionales. Hasta ahora, la planificación estratégica, ha sido una herramienta subutilizada y con pocas aplicaciones prácticas para guiar el quehacer de las áreas de trabajo y los objetivos de los proyectos en ejecución. Como en muchas organizaciones sociales, se sabe que existe un plan estratégico, pero “no se encentra la utilidad o importancia para el trabajo diario”. Una debilidad de esta dimensión, representa el seguimiento, monitoreo y evaluación institucional y de los proyectos, por falta de recursos que permitan instalar un área de M&E que proporcione mayor apoyo y asistencia técnica a todo el quehacer programático, ya que esta función es realizada a tiempo parcial por una persona del equipo técnico. El conocimiento y manejo sobre las distintas temáticas de DDHH que el personal de cada área posee, fue estimado como muy bueno. Se identifica que el proceso de trabajo es dinámico y permite que el personal programático y administrativo genere nuevas competencias al respecto, pero se resalta como necesidad sentida, el hecho de contar con más espacios de capacitación sistemática, de especialización y formación de carrera (especialización) en los distintos tópicos que se abordan en el espacio organizacional. La visión de género e igualdad de derechos para las mujeres, es un tema a desarrollar tanto a nivel transversal como en el trabajo puntual de la organización. El manejo de una política y apropiación de este enfoque de derechos se hace necesario en todo el personal y en los procedimientos organizacionales. Si bien, la organización, no se especializa en la temática, debe incluir este enfoque para lograr mayor integralidad de su visión filosófica sobre los DDHH. Una parte del personal ha desarrollado conocimientos y competencias para el litigio estratégico, especialmente en el sistema de justicia de la Corte Interamericana de DDHH, lo cual representa un valor agregado para fortalecer los servicios de defensoría en DDHH. Las funciones y responsabilidades son asumidas por el personal, en la mayoría de las ocasiones en tiempo y forma, pero hace falta mayor acompañamiento y asistencia técnica para garantizar el mismo nivel de calidad en todas las áreas de trabajo. Esta situación tiene como causa primordial, el hecho de que el CIPRODEH ha crecido en cuanto a financiamiento y proyectos en ejecución, pero no ha desarrollado una estrategia de trabajo en equipo en cada área y entre las áreas en sí. Como resultado, cada proyecto queda prácticamente bajo la responsabilidad y el compromiso de quien lo ejecuta, lo que lleva a resultados mixtos en cuanto al alcance de resultados y objetivos planteados. La reorganización programática actual, es percibida por los funcionarios/as como una situación útil para los fines de sus respectivos proyectos. Sin embargo, no ha logrado establecerse una verdadera visión integradora en cada área de trabajo; debido a que se carece de condiciones y un marco programático orientador. Para el personal, la actual conformación de las áreas de trabajo, cumple
agentas comunes y la conformación de bloques de movimientos y organizaciones sociales que fortalece la capacidad de respuesta de la sociedad civil a la crisis de DDHH que enfrenta el país.
Para el CIPRODEH esta es una dimensión a mantener y consolidar aún más, aprovechando su posicionamiento en la sociedad y la política hondureña, para impulsar y liderar temas clave que contribuyan a reivindicación de los derechos humanos en Honduras.
En forma general, las tres dimensiones permiten concluir que el CIPRODEH es una organización que ha logrado importantes avances en el trabajo de gestión del entorno en distintas materias relacionadas a los derechos humanos. Esto le ha permitido ganar un amplio respeto y reconocimiento a nivel social y político. Esto ha sido el resultado de un fuerte liderazgo y de competencias globales a nivel de la organización. Además, los últimos años han sido aprovechadas y generadas nuevas oportunidades de gestión de recursos que han permitido a la organización, mantener un trabajo constante y en respuesta a las demandas del contexto. No obstante, estos resultados podrían estar en riesgo si la organización no toma acciones para fortalecer la gestión interna, las competencias del personal, desarrolla una visión estratégica integral y especialmente el asesoramiento y asistencia técnica al trabajo desarrollado en cada uno de sus proyectos.
V. Ideario Organizacional del CIPRODEH
En base a los retos y desafíos que a nivel externo e interno enfrenta el CIPRODEH; para el nuevo período de planificación estratégica, la organización replantea algunos aspectos de su ideario organizacional, entre ellos la misión, visión y los objetivos estratégicos que darán respuesta a las principales necesidades del contexto en derechos humanos y consolidarán un liderazgo institucional que ha ido construyéndose durante sus 25 años de existencia:
El Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH) aspira a consolidar un liderazgo que contribuya al fortalecimiento de la institucionalidad democrática de derecho y la justicia social para la vigencia plena y el respeto de los derechos humanos en Honduras.
El Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH) es una organización que genera cambios orientados a la construcción de un Estado de derecho, democrático, justo y respetuoso de los derechos humanos y las libertades ciudadanas, de manera consecuente con la participación inclusiva y necesidades de la población de Honduras.
El CIPRODEH es una organización comprometida con los valores inherentes a los derechos humanos, por tal razón, mantiene y promueve en todos los ámbitos de su quehacer los siguientes principios rectores:
Dignidad Humana La cual asumimos en todo nuestro quehacer como el derecho inalienable de toda persona para vivir en libertad y en condiciones adecuadas para desarrollarse integral y plenamente en el ámbito individual, comunitario y del Estado, desde los aspectos sociales, económicos, políticos y culturales.
Que asumimos y promovemos como una condición imprescindible y universal, para que todas las personas, sin excepción, logren el ejercicio pleno de todos sus derechos humanos.
Que practicamos y nos compromete a la construcción de un sistema democrático con participación ciudadana hasta alcanzar su ejercicio pleno para nuestro país y la región centroamericana.
VI. Enfoque de Cambio Social y Político para Lograr la Vigencia Plena y el
Respeto a los Derechos Humanos en Honduras
El CIPRODEH apuesta por el desarrollo de una sociedad que promueva y demande valores democráticos y reivindique sus derechos en el marco de un Estado social de derecho, responsable, garante de la justicia y las libertades de todas las personas en la sociedad.
En este sentido, la organización se convierte en una instancia social, promotora de esos valores para que con su trabajo, se contribuya a transformarlos en realidad no sólo dentro de las instituciones del Estado hondureño, sino también a lo interno de la sociedad en su conjunto. El CIPRODEH tiene claro que, un requisito indispensable para lograr cambios sostenibles, es que la ciudadanía se organice, participe y se involucre, incidiendo como actor clave en la promoción de la vigencia, el respeto a los derechos humanos y el desarrollo humano integral. Asimismo, la organización es consciente que su ámbito de acción es una contribución a los esfuerzos que otras organizaciones y movimientos sociales realizan para lograr el bienestar y mejorar las condiciones de vida de la población hondureña y que por tanto, debe hacer alianzas estratégicas con otros actores sociales con los que se comparten los mismos principios, a fin de conjuntar esfuerzos para influenciar e incidir en las políticas públicas.
En la figura que aparece a continuación, se ilustra el enfoque de cambio que la organización ha promovido durante los últimos años y sobre el cual enmarcará sus acciones estratégicas para el período de los próximos cinco años:
La figura anterior ilustra la teoría de cambio social y político del CIPRODEH, basada en la interacción de los distintos sectores sociales y el Estado mismo, como actores clave para alcanzar una Honduras con justicia social, la vigencia plena de los derechos humanos y desarrollo humano integral que son condiciones imprescindibles para crear condiciones de vida digna para cada persona en este país.
Tal como se mencionó previamente, el papel del CIPRODEH es un actor más de los procesos de facilitación y motivación del cambio. Este propósito, se alcanzará mediante tres vías: 1) la formación de alianzas estratégicas con otros actores sociales; 2) El acompañando y fortaleciendo directo de las capacidades en la ciudadanía hondureña y; 3) Incidir e influenciar directamente en el Estado para que éste asuma su mandato de garantizar, promover y proteger los derechos humano de la población hondureña. De acuerdo, con esta teoría, en todo momento, la ciudadanía organizada o no, deja de ser un destinatario final de las acciones, para pasar a participar activamente en el proceso de transformación social y, contribuye con su acción al cambio político, como elemento fundamental para alcanzar el propósito de la justicia social.
VII. Marco Estratégico 2015- 2018
Partiendo de los desafíos del entorno, las necesidades de consolidación institucional, la nueva misión/visión trazadas y; el enfoque de cambio social y político, el Plan Estratégico 2015-2018, define los siguientes objetivos y estrategias clave que conforman el marco orientador del trabajo organizacional durante el siguiente período:
El CIPRODEH promueve la investigación y gestión del conocimiento; incidencia política, promoción y defensa en derechos humanos; en sinergia con distintos sectores de la sociedad, para la construcción de un Estado democrático de derecho, que garantice el respeto y protección de los derechos humanos en Honduras.
Promover la gestión del conocimiento, la generación de información, el análisis y el debate en materia de derechos humanos, como herramienta esencial para el diseño de propuestas y modelos de cambio que brinden alternativas de solución a las distintas problemáticas de los derechos humanos en Honduras y la región.
Incidir en el desarrollo e implementación de políticas públicas con enfoque de derechos, procurando amplia participación ciudadana, para que el Estado asuma su rol de garante frente a los principales problemas y desafíos que los derechos humanos enfrentan en Honduras.
Propiciar la difusión, educación y apropiación de los derechos humanos entre la ciudadanía hondureña; generando el empoderamiento, cambios de actitudes y su participación activa en la reivindicación de los derechos y libertades ciudadanas.