

Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity
Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium
Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity
Prepara tus exámenes con los documentos que comparten otros estudiantes como tú en Docsity
Los mejores documentos en venta realizados por estudiantes que han terminado sus estudios
Estudia con lecciones y exámenes resueltos basados en los programas académicos de las mejores universidades
Responde a preguntas de exámenes reales y pon a prueba tu preparación
Consigue puntos base para descargar
Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium
Comunidad
Pide ayuda a la comunidad y resuelve tus dudas de estudio
Descubre las mejores universidades de tu país según los usuarios de Docsity
Ebooks gratuitos
Descarga nuestras guías gratuitas sobre técnicas de estudio, métodos para controlar la ansiedad y consejos para la tesis preparadas por los tutores de Docsity
Es un ensayo de la obra de Gonzalo Portocarrero
Tipo: Resúmenes
1 / 2
Esta página no es visible en la vista previa
¡No te pierdas las partes importantes!
Gonzalo Portocarrero Gonzalo Portocarrero, un reconocido sociólogo peruano, en su obra "La cultura como práctica social y espacio de poder", ofrece una profunda reflexión sobre la cultura no solo como un conjunto de tradiciones y expresiones artísticas, sino como un campo de batalla en el que se disputan significados, identidades y poderes. Su análisis se enmarca en la teoría crítica, utilizando herramientas de la sociología y la antropología para desentrañar las complejas relaciones entre cultura y poder en sociedades contemporáneas. Portocarrero argumenta que la cultura es un espacio donde se manifiestan y se reproducen las relaciones de poder. No se trata de un ámbito neutral o meramente decorativo, sino de un escenario en el que las élites y los grupos subalternos negocian, imponen y resisten significados. Las prácticas culturales, desde las fiestas populares hasta las políticas educativas, están imbuidas de intenciones y efectos de poder. Uno de los conceptos clave que Portocarrero introduce es el de "hegemonía cultural", inspirado por Antonio Gramsci. La hegemonía cultural se refiere a la capacidad de un grupo dominante para imponer su visión del mundo y sus valores como universales y naturales, desdibujando así las desigualdades y legitimando su posición de privilegio. En este sentido, las instituciones culturales como la escuela, la iglesia y los medios de comunicación juegan un papel crucial en la reproducción de la hegemonía. A pesar de la hegemonía, Portocarrero también destaca las formas en que las prácticas culturales pueden convertirse en herramientas de resistencia. Las comunidades subalternas pueden reinterpretar, subvertir y resignificar símbolos y prácticas impuestos por las élites. Ejemplos de esto se encuentran en los movimientos sociales, las expresiones artísticas alternativas y las formas de vida comunitarias que desafían las narrativas dominantes. Otro aspecto central de la obra es la relación entre cultura e identidad. Portocarrero sostiene que la identidad es un proceso dinámico y relacional, construido a través de prácticas culturales que reflejan y configuran las experiencias de las personas. La identidad no es un dato fijo, sino una construcción social que puede ser manipulada y transformada en función de las luchas por el reconocimiento y la inclusión. "La cultura como práctica social y espacio de poder" de Gonzalo Portocarrero es una obra fundamental para entender la compleja interrelación entre cultura y poder. A través de un análisis crítico y profundo, Portocarrero nos invita a cuestionar las formas en que las prácticas
culturales reflejan y refuerzan las estructuras de poder, al tiempo que ofrece una visión esperanzadora sobre el potencial de la cultura como espacio de resistencia y transformación social. Su obra es una llamada a mirar más allá de lo superficial y a comprender la cultura como un campo de disputa en el que se juega mucho más que el simple entretenimiento o la tradición. En resumen, esta obra de Portocarrero es una lectura indispensable para quienes buscan entender la importancia de la cultura en la configuración de las sociedades y las relaciones de poder que las atraviesan.