

Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity
Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium
Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity
Prepara tus exámenes con los documentos que comparten otros estudiantes como tú en Docsity
Los mejores documentos en venta realizados por estudiantes que han terminado sus estudios
Estudia con lecciones y exámenes resueltos basados en los programas académicos de las mejores universidades
Responde a preguntas de exámenes reales y pon a prueba tu preparación
Consigue puntos base para descargar
Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium
Comunidad
Pide ayuda a la comunidad y resuelve tus dudas de estudio
Descubre las mejores universidades de tu país según los usuarios de Docsity
Ebooks gratuitos
Descarga nuestras guías gratuitas sobre técnicas de estudio, métodos para controlar la ansiedad y consejos para la tesis preparadas por los tutores de Docsity
Carta abierta profesores fce frente a la coyuntura del paro o cese de actividades académicas del 2024-1 en la Universidad Nacional de Colombia
Tipo: Monografías, Ensayos
1 / 3
Esta página no es visible en la vista previa
¡No te pierdas las partes importantes!
La Universidad Nacional de Colombia está atravesando por una situación muy compleja, que se manifiesta en el traslape de múltiples crisis. En primer lugar, tenemos la crisis del modelo de educación superior establecido por la Ley 30 de 1992. La congelación de la planta docente y la reducción de las transferencias directas en términos reales del Presupuesto General de la Nación obligó a la IES públicas y a la Universidad Nacional de Colombia a orientar sus acciones a la consecución de recursos en el mercado y a privatizar los programas de posgrado y doctorado. Sin embargo, el desbalance financiero no se corrigió, sino que la brecha ha aumentado con los años. En segundo lugar, podemos identificar una crisis de los mecanismos de representación y el agotamiento de la “democracia restringida” que cobra una naturaleza fractal. La polifonía universitaria fue reemplazada por la monotonía dictatorial de las resoluciones y las circulares. El simulacro de participación se expresa en las reformas que se promueven, donde las voces de los estamentos universitarios son reducidas a los listados de asistencia, mientras sus objeciones o propuestas alternativas no son tomadas en cuenta. En tercer lugar, podemos hablar de una crisis de liderazgo de la Universidad Nacional de Colombia en el sistema público de educación superior y la paulatina pérdida de su papel como la conciencia crítica de la Nación. No podemos olvidar lo esencial: “No son los negocios, es la Educación”. En cuarto lugar, está la crisis institucional actual que dio origen al paro universitario y a la consecuente parálisis de las actividades académicas de nuestra Alma Mater. La evidencia que se revela como en una fotografía muestra que el proceso de designación, del profesor José Ismael Peña como rector de la Universidad no fue transparente. Se desconocieron las reglas del “juego limpio”; esto es, cinco consejeros hicieron uso del secreto y de información asimétrica para manipular el proceso de decisión colectiva. Hasta la fecha, la comunidad universitaria y la sociedad colombiana no ha podido tener claridad sobre lo que “realmente sucedió” el día de la designación. Desde ese momento, se han producido una serie de hechos y acciones dirigidas a configurar una “terapia de shock”: el comunicado de algunos exrectores apoyando el proceso, la renuncia no formal de la representante estudiantil, la renuncia formal de la rectora Dolly Montoya, los demagógicos comunicados y ruedas de prensa del representante profesoral al CSU y por último, la autoposesión del profesor Ismael Peña, como rector ante un notario. Todo ello busca ahondar la crisis, confundir y sorprender a la comunidad, para así – como lo decía Milton Friedman, ideólogo de la doctrina del shock- lograr que “lo políticamente imposible se vuelva políticamente inevitable”. Las profesoras y los profesores de la Facultad de Ciencias Económicas aquí firmantes consideramos que la solución a la policrisis que atraviesa la Universidad Nacional requiere en primer lugar reconocer la complejidad de los conflictos y la temporalidad de estos. Las
opiniones del exrector Moisés Wasserman en el programa de la periodista María Jimena Duzán, son claramente equivocadas. Simplificar es ideologizar. Según el exrector, el problema actual de la Universidad es simple: lo ocurrido obedece a un plan urdido por unos grupos que desean imponer a la comunidad la “democracia directa” para elegir sus autoridades. Todo lo demás son arandelas jurídicas, ergo, cedamos la autonomía a un juez. Demanden, dice el exrector, y sigamos adelante, sin olvidar enunciar su eslogan “Orgullo UN”. Sin embargo, desconoce el exrector Moisés Wasserman y el profesor José Ismael Peña en su carta abierta, que el conflicto que ha generado el proceder de cinco consejeros del CSU es un “conflicto no divisible”. En las circunstancias actuales no existe espacio para el regateo y el compromiso. Se equivocan quienes dicen que el problema es de “más o menos”, es decir, de repartición de puestos y presupuesto. No, ese no es el problema ahora. La discusión va más allá. Lo que está en juego es el modelo de universidad. La solución está en manos del CSU, donde se originó el conflicto; sin embargo, el ausentismo de tres de los Consejeros no ayuda a la salida y sí pone en peligro la autonomía universitaria, como muy bien lo mostró el profesor Rodrigo Uprimny. La autonomía no es un activo, la autonomía no es una opción financiera, la autonomía no es un bien privado para el usufructo de unos pocos. La autonomía es un bien público de la Universidad Nacional. Por ello nos unimos a las voces que le solicitan al CSU reconocer los errores y las irregularidades en el proceso de designación de rector, proceder a nombrar un rector encargado para abrir los espacios al ejercicio pleno de la autonomía universitaria. Consideramos, finalmente, que es un imperativo que las autoridades de la Facultad de Ciencias Económicas también se pronuncien con claridad sobre el estado de crisis de nuestra Universidad Nacional. Gabriel Misas Germán Eduardo Espinoza Álvaro Zerda Sarmiento Cesar Giraldo Luis Fernando Valenzuela Carlos Martínez Becerra Alexander Rincón Gloria Rodríguez Gonzalo Cómbita Isidro Hernández Hernando Matallana Luis Antonio González Álvaro Moreno Rivas Manuel Muñoz Conde Héctor Cárdenas Miguel Víctor Chirinos Marcela Suárez R Oscar Morillo